MODOS Y MANERAS DE PENSAR QUE CONFUNDEN
MOTIVO DE ACCIDENTES Y BAJO RENDIMIENTO
Hola amiga(o) pensante.
Preguntarse que estará pensando alguien es una manera de afirmar la
certeza que tienen todas las personas de que los pensamientos determinan los
hechos que van a suceder.
Se gira la mirada al pasado, se comprueba de igual manera que todas las
historias de vidas individuales y sociales, fueron consecuencias del pensar.
Y
si se baja la mirada a la tierra que se está pisando y luego se recorre el
entorno con la mirada, los hechos que ocurren están siendo accionados por
pensamientos.
En
conclusión; toda la realidad que se produce por la interacción de los pensantes,
es la vida que nos ocupa la atención por la importancia que tiene para la
sobrevivencia, y sobre todo la calidad de vida.
Pero existe la costumbre de llamar pensar, todas las formas de actividad
que ocurren dentro de la cabeza. Y hay algunos de estos modos o maneras que no
producen acción o movimiento, aunque tenga algún propósito pensar así.
Por ejemplo; alguien se sienta a recordar cosas y puede pasar tres horas
de distracción experimentando las emociones que está provocando.
O
ese mismo fulano se pone a imaginar cosas, como una aventura amorosa y se va a
deleitar ya que los hechos los acomoda para terminar satisfecho.
Existen modalidades de pensar mixtas. El pensante recuerda y a la vez le
agrega sus toques y adornos imaginados, bien sea para fantasear o revolverse la
bilis al rumiar su enojo que tiene contra alguien o algo.
Existe
el pensar fóbico, la persona imagina lo que le causa terror y vive momentos
inolvidables. Sin contar aquellos que piensan ser “Napoleón Bonaparte”, o ser
la rueda de una carreta.
A
todas estas actividades se le llama pensar, así que cuando alguien dice que
está pensando, usted no sabe cuál es la modalidad que está usando. ¿Estará maquinando algo? No se puede saber.
De
todas “estas maneras o modos de pensar”, (ya lo he repetido, la expresión es
para referirse al tema o asunto que se piensa, y no al acto en sí) el más importante
de todos es el pensar reflexivo o analítico.
Una pregunta interesante que cada quien debe
hacerse es; cuanto tiempo le dedica diariamente al pensar reflexivo y cuanto a
las otras maneras de pensar.
La respuesta puede aclarar el porqué del bajo rendimiento creativo y
productivo.
No
he mencionado el tiempo que la persona pasa en las redes, viento TV o leyendo.
Son actividades pensativas si la persona lo hace con un propósito. Si fuere
así, está obligado a reflexionar para llegar a tener sus propias ideas y eso es
productivo.
Pero
si solo está holgazaneando, matando el tiempo o distrayéndose, su modo de
pensar es de pereza total.
Quien no ha tenido ocasiones que ha dicho; “lo voy a pensar”, o “lo estoy
pensando”. Estas son promesas de pensar reflexivo. La importancia de los
pensamientos que se van a producir en esas ocasiones en la vida de la persona
lo obliga.
Habría
que preguntarse; ¿es que acaso hay alguna decisión en la vida que no tenga gran
importancia?
La vida en general es como la del escalador a manos libre, cada agarre,
cada sitio donde pone el pie, son decisiones vitales.
Míster
X decide ir en bicicleta al trabajo para mantenerse en forma, y zúas, vino un
loco al volante y se lo llevó por el medio. Una simple decisión y se acabó el
juego.
Si
se examinan los accidentes, casi todos tienen el factor descuido. Y que
significa descuido; exceso de confianza o dejar de pensar en lo que se está
haciendo o se va hacer.
Una vida sin riesgos, sin peligros, no existe ni en ficción. Y no se trata
de volverse paranoico con los peligros, se sabe que existen, pero si la
actividad pensativa está en algunos de esos modos que no es reflexiva, ocurre
lo inesperado.
Los pensamientos decisivos solo encienden la mecha de la acción, la
acción misma requiere de una actividad pensativa constante. Pero si la costumbre
es empezar a accionar y luego poner el piloto automático para acomodarse en un sillón
mental a ver películas. “Bien hecho que se cortó los dedos”.
Esa
expresión se usaba mucho cuando niño por venganza; “bien hecho que te caíste”.
Pero en nuestro caso, la persona estaba descuidando un peligro que conocía muy
bien; y llevaba muchos años trabajando eso con éxito; pero se descuidó.
Actividad
pensativa aquí, es para referirse al pensar reflexivo, al análisis, o usar la
imaginación para visualizar propuestas, o distintos escenarios y seleccionar el
que parezca mejor para llegar a una decisión.
Hay que escoger a consciencia el modo de pensar, y evitar usarlos sin
ninguna predeterminación o propósito.
Ha
sido un placer. Buen provecho pensando: Nos vemos pensante.
Autor: Emilio R. Fernández Ramos
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