EN HONOR A LA MUJER


LA MATRIZ DE UNA MUJER, SIGNO DE IGUALDAD Y LIBERTAD

Por bendición divina la matriz de una mujer no distingue de género para prestarle servicio a la vida, para que se manifieste como desee hacerlo.

En el vientre de una mujer, todos somos iguales. Hombre o mujer gozan del mismo privilegio, y no hay conflictos genéticos porque la naturaleza sabe que la vida de la especie humana consta de dos lados como una moneda, femenino y masculino. No existe la moneda de la vida sin uno de los lados. Por lo tanto, no hay un lado más importante que otro, aunque estén diseñados para funciones diferentes en el proceso de engendrar un nuevo ser humano.

La mujer es por naturaleza la mayor demostración de igualdad al llevar por nueve meses en su vientre a un ser, que será atendido con su sangre sin distinción de sexo. Sin embargo, de alguna manera, la sociedad perdió de vista su valor, y le ha estado escamoteando su lugar, el cual debe ir a la par del hombre. Su reivindicación está en la recuperación de la consciencia de quienes se sienten superiores, por el envenenamiento de culturas ancestrales, cuyo  veneno viene trascendiendo a través de sucesivas generaciones hasta el día de hoy. ¡FELIZ DÍA Y TODOS LOS DÍAS DE LA MUJER!

Autor. Emilio R. Fernández Ramos  

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