¿QUIERES DAR UN GRAN SALTO A TU ESTADO DE CONSCIENCIA NATURAL?

  

ENTÉRATE DEL TRABAJO QUE TIENES QUE HACER EN TI MISMO

Hola amiga(o) pensante. Los seres humanos, casi la totalidad, ven la espiritualidad como la verdadera vida o un factor importante que debe considerarse para entender la vida.

Sin importar cual camino se elige para adentrarse en la espiritualidad, todos deben pasar a través de su mente.

Todos han creado una personalidad sin estar conscientes de lo que estaban creando y la importancia que tenía en su futuro, cada aspecto que diseñaran.

Es decir, no se daban cuenta que cada aspecto o actitudes de esa personalidad que construían, tienen establecidas respuestas psicológicas pre-programadas que funcionan en automático.

La actitud o la manera de responder ante una situación dada, contiene un paquete emocional, que se va a manifestar como si fuera una respuesta natural y consciente. “Me tienen que aceptar porque yo soy así”. “No puedo ser de otra manera”.

Estos comportamientos provienen de su intelecto, de su capacidad de análisis, de lo que algunos llaman la mente consciente. Como ven, se diferencian de comportamientos compulsivos, que la misma persona puede reconocer como dañinos o traumáticos que afectan su forma de vida.

Entonces, podemos dividir las personas en dos grupos; los que necesitan hacer reparaciones o correcciones de su mal funcionamiento psicológico, y los que se han manejado bastante bien y gozan de una buena estabilidad.

En otras palabras; aquellos que deben corregir fallas en su personalidad o están todavía en ese trabajo; y aquellos que han trabajado y eliminado aspectos que para ellos eran debilidades o fallas.

Los que saben que tienen que hacer correcciones, o están dedicados a ese trabajo de eliminar o quitar esos aspectos psicológicos que desmejoran su calidad de vida, deben reconocer que no están progresando.

Recuperarse de las deficiencias que se ocasionó, son ganancias plausibles. Muy bien hecho, pero no ha progresado, solo han vuelto o están tratando de volver a su estado psicológico y espiritual que tenían.

¿Ya hiciste todas las correcciones que debías hacer? ¿Recuperaste el control perdido de tus emociones, pensamientos y de la imaginación?

Si lo hiciste; entonces la compulsión mental se ha reducido al mínimo. Es decir, la reactividad de la mente ha sido controlada, y has quedado funcionando con una mente con la que te comunicas con mayor libertad. Si quieres puedes decir que usas tu mente consciente.

Tu mente que ahora usas de manera voluntaria y consciente, significa que tus archivos de memoria que se encuentran en ella es el conocimiento o intelecto que usas en tu desenvolvimiento diario.

Tu personalidad responde a estos programas que tú aceptas y permites que ella los use en automático.

Es decir, la mente dará las respuestas que tenga que dar sin que tú intervengas. Tú se lo permites, y ella mientras más uso le dé a ese software, más autonomía adquiere, y el pensante solo entiende o interpreta lo que la mente procesa para él. Su inteligencia se ha estancado y se ha vuelto retrograda.

Como resultado, ese pensante, ese espíritu, no ha terminado de pasar a través de su mente. Sigue dependiendo de la mente, y lo que llama consciencia, es producto de lo que la mente reconoce para él. Esas serán sus ideas, esas serán sus creencias, esas serán sus verdades, esas serán sus maneras de ser y de sentir. Una personalidad estancada y retrograda, en vista que en la mente acumula lo pasado. Lo que ya es historia para él.

Aquel que quiera dar un gran salto espiritual o un gran salto como pensante; o lograr su estado de consciencia verdadero, debe ser capaz de separarse de la mente por completo. Esto no significa que la va a eliminar. Significa que el pensante debe experimentar un estado de SER, quizás no conocido o recordado, que la mente no le está proporcionando, ni le va a proporcionar nunca.

Un segundo o un minuto en ese estado, es una eternidad y viceversa.  

Por otro lado, el cuerpo también se libera de la intromisión de la mente en sus funciones, y será el pensante quien se comunique con su cuerpo de manera directa.

Aquellos que soportaron leer hasta aquí, son los incansables exploradores, pioneros o buscadores espirituales que construyen su camino a la libertad a través de ellos mismos.

Existen muchas prácticas que ofrecen lograr estados elevados de consciencia. Yo opino que no depende de la práctica, sino del practicante. Si lo desean puedo contarles como hice para lograrlo.

Autor: Emilio R. Fernández Ramos