LA FLOR DE UN DÍA
LA FLOR DE UN DÍA
(Poema)
Es mi bella de un día. En
un día la vi nacer, la vi crecer y la vi morir. Fue una vida amorosa tan corta,
que no me dio tiempo sufrir su pérdida. Es tanto mi amor por ella, que veo la
rama vacía y siento que se ha ido al interior de la planta para cambiarse de
vestido. Cada mañana voy a esperarla, consciente que las damas se toman su
tiempo para acicalarse. Y nunca me deja defraudado, después de cierto tiempo
vuelve aparecer el botón y me deleito mirando su rutina de transformación para
danzar esparciendo con dulzura el aroma de ensoñación que me tiene cautivado. Mi
bella de un día, tiempo suficiente para mostrarte que te amo.
Autor: Emilio R. Fernández Ramos
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