EL ASEDIO DE UN ENEMIGO MORTAL

    LOS BENEFICIOS DE ESTAR EN CONTROL DEL ACTO DE PENSAR

    Hola amiga(o) pensante. Los pensantes somos dado a subestimar futuros hechos, arropándonos en un exceso de optimismo.

   Es tanto el deseo de estar bien, que nos negamos a evaluar las probabilidades que suceda lo contrario, que nos toque estar mal. Que nos toque estar expuesto o viviendo una crisis sanitaria como la que se está viviendo con el coronavirus.

  La exigencia de los líderes, Autoridades y gobernantes es “mantener la calma”, “mantener la serenidad”. En otras palabras, mantenerse en control.

  Si con estos hechos los pensantes no terminan de reconocer que mantener el control de la actividad pensativa es vital y decisivo entre la vida y la muerte, entre la salud y la enfermedad; la verdad, no sé si vale la pena repetírselo como lo he venido haciendo durante estos cinco años.

  Sin control del acto pensar, no se puede mantener la calma. No se puede evitar entrar en pánico. Y un pensante en pánico, un pensante viviendo aterrorizado, casi paranoico con el contagio de la enfermedad, está destrozando su sistema INMUNE.

   Las condiciones de tu organismo dependen de tu influencia. Tu como pensante al perder el control pierdes la inmunidad. Te vuelves psíquicamente frágil, te vuelves débil, te vuelves cobarde y tu organismo queda desamparado. Prácticamente obligado por ti, a no presentar batalla si el enemigo lo asedia.

   Ahora la población mundial está siendo obligada a prevenir para evitar una pandemia. Prevenir ha llegado a su máxima importancia.

  Pero yo no sé qué va hacer el SISTEMA para que los pensantes a los que ha manipulado para que no se ocupen de tener el control en la producción de sus pensamientos, ahora sean preventivos y no entren en pánico.

   Una desbandada en la población terminará de complicar las cosas y el costo a pagar para recuperar la calma, van a ser millones de muertos y países arruinados.

  Todos estamos amenazados. ¿ahora que van hacer para prevenir no entrar en pánico? … Van a lavarse las manos y a estornudar en el codo.

   De mi parte ya saben qué hacer para evitar perder el control, pero para eso necesitan tiempo de práctica, de ejercicio, y yo quisiera saber: ¿Cuántos lo han estado haciendo?

   Es mucho más la amenaza que la población pierda el control, que el coronavirus.

  Un pensante que ha perdido el control, no solo causa que otros lo pierdan por su contagio, es tan peligroso que hay que detenerlo a la fuerza, peor que si fuera el virus.

   Los pensantes en su desesperación quieren proteger a su familia. ¿quieren ver un niño asustado? …Basta que vean a sus padres o protectores aterrorizados, o actuando como locos.

   ¿A quién protege un pensante que ha perdido el control? Guiarse por las decisiones de una persona descontrolada es un suicidio.

   Y en situaciones como la que se está viviendo, en la familia debe haber por lo menos alguien que resista, se necesita a alguien que mantenga la cordura, que no pierda el control, y yo espero que ese seas tú mi amiga(o).

  Ha sido un placer. Buen provecho con tu auto-control. Nos vemos pensante.

   Autor: Emilio R. Fernández Ramos

   Correo: emiliofernandezr@hotmail.com