EL ACTO DE PENSAR Y LA CALIDAD DE LOS PENSAMIENTOS.
HAY CLAMOR PARA QUE VUELVA LA PAZ Y LA
JUSTICIA. COMO VA A VOLVER LO QUE NO EXISTÍA ANTES.
Hola amiga(o) pensante. ¿Tendrá el arte de
pintar algo que ver con la calidad y belleza de la pintura?
¿Tendrá el acto de pensar algo que ver con la
calidad de los pensamientos?
Para respondernos observemos lo que está ocurriendo
en el mundo en este momento. Un virus matando gente, y hasta el momento
indetenible; las consecuencias económicas golpeando sin piedad a los más débiles;
y en el medio de esto, las potencias aumentando sus desavenencias, y las manifestaciones
violentas, causando daño a quienes ya están bien aporreados.
El coronavirus está feliz con las revueltas,
en ellas se pierden toda medida de precaución y se tendrá muy pronto unos
cuantos muertos que no estaban anotados para dejar este mundo.
¿Cree usted amiga(o) lector que todo esto que
está padeciendo la humanidad es producto de pensamientos que promueven la paz y
la justicia?
Para responder, no nos salgamos por la tangente,
con las razones y motivos que cada quien tiene para participar en todos los
hechos que están azotando la humanidad, y que hemos mencionado arriba.
A parte de los pocos que tienen convenientes
intereses para estar activos en los distintos frentes de la crisis mundial, los
que somos mayoría, conscientes que esto debe terminar para dedicarnos a promover
la paz y la justicia. Nos dividimos en múltiples puntos de vistas, para darle
la razón a uno u otro de quien, o quienes promueven las crisis y de los que se están
aprovechando de ella.
Clamamos para que VUELVA LA PAZ Y LA
JUSTICIA. Y yo me pregunto; ¿Cuál paz, cual justicia va a volver si tenemos
siglos que eso no existe?
¿Es que acaso estamos haciendo algo diferente;
es que acaso nos hemos vuelto unos diestros pensadores, que tenemos dominio y
consciencia de la importancia del acto de pensar, para mejorar progresivamente
la calidad de nuestros pensamientos y lograr entre todos que se produzca la paz
y la justicia que anhelamos?
No parece. Seguimos respondiendo y reaccionando
de la misma manera. Ahora con la globalización de las comunicaciones, se
completó el ciclo donde un pequeño grupo de personas, te conoce más que tu
mismo.
Conocen más a esa gran mayoría que quieren
paz y justicia que ellos mismos. Con ese conocimiento y con sus avanzadas
herramientas tecnológicas, nos tienen acondicionados como ratones de laboratorios
para que reaccionemos a sus instrucciones.
El comportamiento defensivo y de reclamo,
termina favoreciendo a los que saben como sacar provecho de un pueblo que
quiere trabajar y vivir en paz.
Cuando convocan a una manifestación pacífica,
si no te has dado cuenta, nunca termina en santa paz. A menos que los
aglutinados sean un grupo insignificante, que ni los ladrones puedan sacarle
provecho saqueando negocios.
Del resto, ya existen innumerables maneras exitosas,
para que la manifestación quede como un recuerdo histórico y no logre ningún objetivo
que cambie de raíz lo que exigen.
Todavía Martin Luther King, está en una
ventana del cielo, esperando a ver si se cumple su sueño. En otra ventana está el
maestro Gandhi y una gran lista de venerables que echaron el resto para que se
diera esa paz y justicia que ahora pedimos que “vuelva”. Todavía esos
venerables esperan por nosotros.
El grado de inconsciencia de la humanidad es
mayor que el grado de consciencia. Imposible frenar o revertir está caída de
esta manera.
Pero si se puede, si hay una manera para que
todo pensante que anhele esa paz, justicia y armonía, juntos, sobrepasemos la
fuerza negativa…logrando primero, esa paz, esa justicia y esa armonía en
nosotros mismos.
Estamos siendo disonantes, no somos capaces
de lograr consonancia con los demás pensantes del conjunto. De esa manera nunca
se va a lograr, que el bien esté por encima del mal.
Así lo creo y esta es la razón de la
existencia de “actividad pensativa”, invitarte a que te conviertas en un
pensante psicológicamente autosuficiente. Que seas amo y señor de tu psiquis,
para que los pensamientos que produzcas tengan la calidad para darte beneficio
a ti, a tu familia y que su onda se expanda a toda la humanidad.
Ha sido un placer. Buen provecho dándote paz,
justicia y armonía. Nos vemos pensante.
Autor: Emilio R. Fernández Ramos
Correo; emiliofernandezr@hotmail.com
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