¿HABLANDO SOLO? MUCHO CUIDADO


IMPORTANTES DETALLES EN LA COMUNICACIÓN DEL PENSANTE CON EL MISMO. MEJORA ESA COMUNICACIÓN
   Hola amiga(o) pensante. Hablar solo, como popularmente se dice; es hablar con uno mismo. Pero que no te vean hablando solo, porque empiezan a sospechar que se te salió un tornillo, o lo tienes suelto.
   De hecho, si vas a una consulta y respondes que sí hablas solo, sin que te des cuenta el médico que te atiende hace una nota resaltante con la observación.
  Lo que los pensantes en su mayoría no saben, es que todo el mundo lo hace. La comunicación con uno mismo es fundamental, es natural.
  El asunto es, que esa comunicación se sale del control del pensante, y su personalidad que ya funciona en automático, controlada por el ordenador llamado mente. Sufre alteraciones y la personalidad hasta se divide en uno o varios yoes.
  La famosa conciencia que te regaña porque hiciste algo indebido, esa amiga tuya actúa como un yo, con un grado de autonomía, que puede llegar a extremos peligrosos para la cordura.
   Es natural que el pensante se comunique con él mismo, todos lo hacen a diario, a veces con tanto volumen que los que están cerca oyen sus diálogos. Y se alejan de él, no vaya a ser un loco peligroso.
   Ahora, pon atención en esto cuando te comuniques contigo: ¿usas palabras del idioma que hablas? Seguro que sí, de otra manera no te entiendes.
    Para de leer. Para de leer y prueba en este momento habla contigo como acostumbras. … Yo espero… a ver.
   Jajaja… tú y tu yo hablan el mismo idioma. Seguro que ahora es que te das cuenta que ustedes dos hablan el mismo idioma. …No, yo sé que lo sabias, es una broma.
   Hazte esta pregunta, ¿Cómo hace un mudo para hablar consigo mismo …  Jajaja…no lo puede hacer con señas. ¿O sí?
  Imagínate el mudo parado frente a un espejo haciéndose señas para entenderse lo que se está diciendo.
   Creo que ya te hice causar un enredo en la mente. ¿Pero sabes cual es mi intención? 
   Mi intención es darte esos valiosos detalles que te prometí. El mudo, o la persona que no puede hablar, al no usar palabras, no usa sonidos. “Las palabras son un conjunto de SONIDOS articulados que tienen un significado fijo”.
  Esta serie de sonidos articulados son los sonidos de las LETRAS que forman las palabras. Una letra es un sonido. Ella por sí sola no tiene significado, pero si debemos aprender a pronunciar el sonido y a grabarnos la imagen del símbolo que la representa para poder comunicarnos por escrito.  
  Pero es con sonidos que nos comunicamos de manera verbal. Un sonido es un comportamiento de energía. Las palabras o el símbolo, no se mueven, no viajan, quien tiene movimiento y viaja es el sonido.
  De hecho, observa el hábito tan fuerte que tenemos para comunicarnos con palabras, que cuando estas leyendo, así como lo estás haciendo ahora, hay una imitación gutural de pronunciación de las palabras que lees. Lee y pon atención.
  (Esta es una nota aparte del tema. La lentitud en la lectura se debe a que tu vista y la mente se mueven más rápido que el tiempo que pierdes en la pronunciación, y estás tienen que esperar que tu imites la pronunciación de las palabras. Si resuelves este problema tu velocidad de lectura aumenta.)
  Esta no es una clase de gramática, vamos a relacionar lo dicho en el tema principal, con la actividad pensativa.
  Ya dijimos que el pensante piensa hasta en voz alta, en ese momento eso que llama pensar, es que se está comunicando con el mismo.
     Si yo te digo que te puedes comunicar contigo, sin sonidos o sin palabras. Que puedes hacerlo con imágenes, o la idea desnuda sin ninguna envoltura. ¿Lo crees posible?
  Cuando ves una película, se están comunicando contigo usando sonidos e imágenes. Inclusive con las imágenes la idea o el significado que se transmite es mucho más fácil de entender y con menos riesgos a los malos entendido por tener fallas en el uso de las palabras.
   Obsérvate, muchas veces la comunicación que tienes contigo, la haces con imágenes. Si te pones imaginar que estás apurruñada(o) (apurruñar; apretar cariñosamente a alguien) con tu pareja y experimentas esas sensaciones agradables, notaras, si usas imágenes, ideas sin envoltura o palabras (sonidos)
  El pensante vive pensando y no observa como lo hace. Para recuperar su destreza pensativa debe hacer consciencia de lo que está haciendo en automático.
   En este caso, la forma más TORPE de comunicarse con el mismo, es usando palabras. Usa la misma forma de comunicación que usa con otros pensantes.
   Usar imágenes para transmitir la idea, sigue siendo torpe, pero mucho mejor que las palabras.
  La forma natural, limpia y sin tropiezos es usar la idea sin envoltura. Para decirte lo que ya sabes que te vas a decir, no hace falta usar imágenes o palabras. Por ejemplo; estas distraído y te acuerdas de un compromiso, y te levantas de la silla apurado y te dices. “carajo, tengo que ir al banco”. Eso ya lo sabias y te los estas repitiendo con palabras.
   Otra cosa es cuando estas reflexionando, cuando estás usando la imaginación para crear, para producir ideas. Aquí si tienes que recurrir a representaciones simbólicas.
  Es como el artista plástico que está en su cuaderno de notas, trazando rayas y haciendo bosquejos buscando la idea o la imagen que transmita la idea que tiene en mente.
  Aquí hablamos de ese dialogo que tiene el pensante consigo mismo. Te voy a explicar a que se debe esa comunicación. Pero debes saber que la comunicación exige la existencia de un punto emisor y un receptor. Con un solo terminal no se produce comunicación.
  Los que vienen leyendo mis artículos saben que cuando hablo del pensante, estoy hablando de quien en esencia eres, hay quienes le llaman espíritu o alma.
   Este pensante cuando produce una personalidad, en cierto modo esta personalidad se desenvuelve con cierta autonomía que está a cargo de la computadora llamada mente. Y el pensante y su personalidad representan los dos terminales de la comunicación.
   En la medida que el pensante pierde control del acto de pensar, pierde control de los pensamientos que produce. Consciente o no, estos pensamientos decisivos se integran a su personalidad, la mente los usa en sus patrones de comportamientos automatizados y el pensante parece no tener voluntad sobre ellos.
   No hay un pensante con la autoridad suficiente para decirle a la mente: “párame eso ahí”. “Ayer lo hice así y me salió mal la cosa, vamos a cambiar ese programa”.
   Este pensante que ha perdido el dominio, o el control del acto de pensar, se siente separado de su personalidad o de algunos de los patrones de comportamiento que controla la mente.
  Es entonces que necesita comunicarse como si fuera algo o alguien separado de él. Y a esa personalidad de la cual se siente separado, debe hablarle también con palabras.
  Y cuando la condición se hace crónica, esta personalidad le habla a él como si fuera alguien totalmente diferente, hasta desconocido para el pensante.  
 Estas situaciones de doble personalidad, bipolares, tripolares, y más polares… cualquier tipo de conducta fuera del control del pensante, es producto de la perdida del control de la actividad pensativa que el pensante va acumulando desde que nace.
   Hazte consciente de la manera como te comunicas contigo. Ese es el primer paso para corregir la que haya que corregir.
   La ignorancia no debe tener la carga peyorativa de ser bruto, es a veces producto de no prestarle atención a cosas elementales para la vida.
  Te invito a observar, luego hablamos. Ha sido un placer. Buen provecho con la comunicación contigo mismo. Nos vemos pensante.
   Autor: Emilio R. Fernández Ramos

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