EL DEMONIO ES UN CHIVO EXPIATORIO
VIVIR SIN PENSAR EN DIOS ES IMPOSIBLE PARA LOS SERES HUMANOS.
Hola amiga(o) pensante. En el mes de la
espiritualidad cristiana, debemos hablar a “calzón quitado”; “sin pelos en la lengua”;
“sin cuidarse el trasero de lo que puedan pensar los demás”, “y si nos quieren
seguir tratando, o excomulgar, es asunto de ellos.
El ser humano es el único ser vivo de este
planeta que tiene la “necesidad” de pensar en dios o en su creador. Para el
resto de los seres vivos es un acto tan natural vivir la vida que les fue
concedida, que no les hace falta pensar en su creador y tratar de ganarse su
afecto y preferencia.
Estos otros seres vivos, al no pensar en dios
no producen diferencias de opiniones con respecto a el creador de sus
existencias y no tienen que llegar a matarse entre ellos para demostrar que su
dios, el que están pensando, es el verdadero.
Considerar que dios creó al ser humano y toda
la vida que existe en este universo, pero no creó el universo, no le cabe en la
mente a ningún creyente.
El universo es también su obra, y ya nos
podemos dar cuenta que todavía la está desarrollando. Es una obra inconclusa,
en algún momento la concluirá. Cesará de crearla y está empezará a morir.
Es decir, para el ser humano dios creo todo lo
que existe, pero se contradice cuando considera que hay situaciones que se le
han escapado a su dios de las manos, y esta es hora que no ha podido evitar que
estas entidades en rebeldía le destruyan su obra o causen que los seres que ha
creado con tanto amor no vivan como el decidió que vivieran.
El cabecilla de estos entes que habitan en un
universo que el dios que la gente está pensando está creando, por lo que no hay
manera que no obedezcan a los lineamientos naturales dispuestos por el creador,
los seres humanos le dan muchos nombres; satanás, lucifer, el demonio, etc.
La causa primigenia (o Dios) para toda esta
existencia universal, antecede a la existencia. Está más allá del alcance de la
imaginación de cualquier ser humano por muy pensante que sea.
Porqué tendría esa causa que mandar mensajeros
para explicarle a los seres humanos cuáles son sus gustos y preferencias, y el
comportamiento que debieran de tener; pudiendo incluir esta información, o la
manera de saberlo, en el diseño original que hizo de nosotros
Considerar lo contrario, es considerar que
dios cometió muchos errores con los seres humanos y está tratando de enmendarlos,
pero esta es fecha que no sabe como corregir esas fallas. El demonio sigue
haciendo de las suyas, los seres humanos hacen lo que les da la gana, y les
suceden cosas horribles que no pueden entender como su dios lo permite.
Es tal la confusión y el desespero de los
seres humanos, que ya lo que desean es que el dios que están considerando, para
reparar los errores que cometió, acabe con un apocalipsis toda la vida en el
planeta para que empiece de nuevo con ellos como los elegidos para ese nuevo
comienzo.
¿Sacrilegio! Gritó uno por allá atrás. Alguien
grita, “dios no tiene nada que ver con lo que hagan los seres humanos, somos
nosotros los que hacemos las cosas malas, no es dios.”
Muy buen argumento le respondo. Estas acusando
a los seres humanos de cometer los errores, pero lo dices para evitar que le
caigan las culpas a tu dios, el dios que has imaginado. Igual como se ha
imaginado un poderoso demonio, para que cargue toda la culpa de lo malo que
ocurre con los seres humanos.
Pero sin querer sigues afirmando que dios está
de manos atadas también con los seres humanos. Otra de sus creaciones que se le
sale de control y tiene que esperar que recapacite y lo acepte a él como su
creador para que pueda vivir la vida de acuerdo a lo programado.
El resto de lo seres vivos y el mismo universo,
visto como una vida también, se portan bien. Cumplen y obedecen las
instrucciones originales del creador. El ser humano y el demonio no.
Espero no seguir cometiendo sacrilegios para
algunos, pero acostumbro a hacerme preguntas y luego me dedico a contemplar
hasta que vea una respuesta loable para mí. Me pregunto.
¿Y si esa causa creadora nos hizo, así como
somos, es decir, libres de considerar o pensar para experimentar la vida como
lo deseemos?
La respuesta para mí; es que es factible ese
libre albedrío. Y este es el meollo del asunto que tiene traumatizado y medio
locos a los seres humanos. No saben cómo usar esa libertad de pensamiento sin
hacerse daño a sí mismo o a los demás.
Si muchos examinaran esta probabilidad, y
fueran capaces de permitirse experimentar los que sucede con sus pensamientos,
creencias, consideraciones, suposiciones, ideas, conclusiones, entendimientos,
etc. Se convencerían que el creador no ha cometido ningún error, los errores lo
cometemos nosotros y así como tenemos ese libre albedrio para cometerlos,
también lo tenemos para corregirlos.
Hasta el demonio dejaría de ser victima de
acusaciones infundadas; y quizás deje de existir en las mentes humanas que
necesitaban un chivo expiatorio.
El demonio como invento, es un chivo expiatorio,
no solo sirve de excusa para no culpar a dios de lo malo, sino algo que es
mucho más importante y que tiene mucho peso para el ser humano “pecador”, o
cometedor de crímenes y actos que van en contra de la vida propia o la de los
demás… ¿Saben de qué se trata?
Que los seres humanos necesitan una
oportunidad para reivindicarse.
Y si todo lo que hizo mal fue por culpa del
demonio, puede ser perdonado por dios. De otra manera tendría que tener mucho
valor para admitir que todo lo que hizo o dejó de hacer en esta vida, fue su
entera responsabilidad. Y para muchos, eso es un excesivo peso para encarar la
verdad verdadera.
Por esa razón el chivo expiatorio del demonio,
le permite en un par de minutos deshacerse de toda la inmundicia que lleva
sobre sus hombros, pero ahora tiene que dedicar su vida a “jalarle bolas a el dios
que ha imaginado”. En otras palabras; tienen que asegurarse que el dios que
lleva en su mente, esté pendiente de lo que hacen para complacerlo.
Dios les concedió el libre albedrío de pensar
y experimentar lo que consideren, pero no pueden observar que el dios en el que
están pensando, es también una idea más como todas las que piensa. Excepto que
la idea de dios la ha llevado a la punta del pináculo por encima de cualquier
otra idea que se le ocurra. Incluyendo al mismo pensante que fue que la pensó.
Todo el problema del ser humano se resume en
el acto de pensar que puede ejecutar con libre albedrío para producir
contenidos o los significados que desee.
La causa creadora de este universo y de la
existencia de la vida, hasta nombrarla “creador”, genera tendencias a
considerar que es masculino. Creador o dios, son palabras que usamos para el
género masculino.
Por si sola la palabra desencadena
interpretaciones de dios como si fuera un ser humano, solo que es como un ser
humano superior. De hecho, nos llenamos de orgullo llamándonos hijos de dios
porque tenemos un cuerpo parecido al que imaginamos que tiene él. Pero el gato,
las cucarachas y ratones no parecen ser hijos de dios.
¿Crees o no crees en Dios Emilio?
Respuesta. Dios o esa causa creadora de mi
existencia, es lo único impensable para mí. Pensarlo sería una torpeza que no
voy a cometer. Sigo usando mi libre albedrío con un acto de pensar autodeterminado
para promover una experiencia de vida en profunda unión con el resto de la
creación. Y no puedo pensar en esta grandiosa creación sin asumir de manera
tacita e implícita, no verbal; que existe una causa creadora. A la que ustedes
llaman “Dios”.
Ha sido un placer. Buen provecho con la
libertad para pensar. Nos vemos pensantes.
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