SECUESTRADO Y HECHO ESCLAVO POR SUS PROPIOS PENSAMIENTOS

LA LIBERTAD QUE SOLO DEPENDE DE TI.

Hola amiga(o) pensante. Es lamentable, pero hay una gran cantidad de pensantes que han sido secuestrados y convertidos en esclavos por sus propios y verdaderos hijos, o sea, por sus propias creaciones o pensamientos.

Podemos hacer una imagen mental viendo a ese ser pensante con una cadena en el cuello siendo conducido por sus propias creencias. Creencias, ideas o pensamientos que el mismo se embarazó y parió sin asistencia médica.

Un auténtico creador, caminando de rodillas detrás de sus obras.

Ningún Ser pensante se puede desenvolver en esta sociedad humana sin primero producir un pensamiento. Pero hay quienes parecen que actúan o accionan sin pensar. Estas personas son reconocidas por ser imprudentes, violentos, y con conductas y manera de ser que hasta ellos mismo se autodestruyen.

El hecho de que parezcan que no piensan en el momento, no significa que no hayan pensado. Ya lo hicieron, el asunto es que son viejos pensamientos que ya lo dominan y lo conducen de acuerdo a sus contenidos.  El dominio es tan fuerte que le impiden que para (del verbo parir), otro hijo que pueda suplantar a esos pensamientos que lo tienen esclavizado.

Los pensamientos dominantes anulan la INICIATIVA del pensante a producir nuevas o novedosas ideas. La pérdida de esta iniciativa significa, el cierre de cualquier posibilidad de mejorar, o de ser un pensador cuyos pensamientos respondan a su crecimiento personal y éxitos en la sociedad.

Las personas que no pueden cambiar conductas o actitudes cuando lo desean hacer, o fracasan cada vez que lo intentan, tengan la seguridad que hay un pequeño ejército de pensamientos que lo tienen secuestrado y esclavizado.

La repetición de comportamientos, conductas o maneras de ser indeseables; bien sea que la persona se dé cuenta o no, son dictados de pensamientos que alguna vez concibió y su mente se encarga de mantenerlos activos.

Y toda esa debacle mental causada por él mismo pensante, comienza con la pérdida gradual del control del acto de pensar.

El autocontrol es imposible en alguien cuyo acto de pensar no responde a su voluntad. Cuando el pensante se encuentra en plena lucha con su mente, tratando de detener su accionar compulsivo, ya ese pensante no va al volante. Ese pensante ya fue secuestrado y hecho esclavo por sus pensamientos cuyo administrador y jefe ahora; es la mente.

Mientras se siga creyendo que el cerebro es que le da significado a los hechos y crea los contenidos de los pensamientos que producen el estado psicológico, no sucederá una recuperación del poder perdido del pensante y de su habilidad para operar la mente.

Ha sido un placer. Buen provecho pensando, no tienes por qué pasar tantos malos momentos causados por ti mismo.

Autor: Emilio R. Fernández Ramos  /De Caripito hasta los tuétanos