¿QUIERES CONFIAR EN TI, PERO NO PUEDES?

 

  YA ES HORA QUE ENTIENDAS CUAL ES TU PROBLEMA

  Hola amiga(o) pensante. Nadie confía en aquello que no conoce. Pero lo peor que puede pasarle a una persona; es confiar en algo o alguien, cuyo conocimiento es errado.

 Como se puede observar, el conocimiento es fundamental a la hora de generar confianza. Y la ratificación de esa confianza depende de los resultados obtenidos.

  Son estos resultados los que muestran si ese conocimiento es verdadero o falso. O que tan cerca de la verdad se encuentra.

  Un pensante consciente de estas reglas, que las use para su desarrollo personal y en el logro de sus objetivos, no se puede permitir insistir en mantener la misma confianza o repetir la misma fórmula o ideas, después de ver los resultados.

  Es imposible estar consciente o comprender las causas de porqué las cosas no salen como se desean, y permanecer impasible haciendo lo mismo y de la misma manera, y no detenerse para hacer reajustes, modificaciones o replantear de nuevo todo el asunto antes de actuar.

  La confianza en sí mismo, es el soporte de cualquier otra confianza que se vaya a poner en algo o alguien más.

  ¿Pero qué está pasando con esa confianza? ¿Ya has observado cómo se encuentra la confianza en ti mismo?

  Aquel que tiene dudas, no se siente seguro o no puede mantener con firmeza su confianza, lo primero que tiene que examinar es el conocimiento que tiene de sí mismo.

  “Conócete a ti mismo”. Esta expresión parece mágica, la gente cree que es algo fácil de hacer.

   Presta atención a esta información; la realidad que se percibe a simple vista, demostrado está, es solo una apariencia.

  Los científicos han tenido que superar esa capa superficial de la apariencia que muestra el universo, y la que muestra la misma realidad subjetiva que todo individuo considera como su verdad, para poder llegar a un conocimiento más verdadero o más próximo a la verdad.

 Pero no hay que ser científico para conocerse a sí mismo. Y no existe una biografía bien detallada de la personalidad de toda persona en las bibliotecas o en algún archivo de un banco de memoria digital.

  No hay manera, es imposible que otra persona pueda saber más de ti que tú mismo. No pierdas el tiempo con adivinos, brujos o expertos psicólogos para que te digan quien eres en verdad.

  Si el conocimiento que tienes de ti mismo es mayoritariamente cierto, la confianza en ti mismo tiene que ser muy buena. Y como ya mencionamos, al examinar los resultados puedes entender lo que haya pasado con los hechos.

  Es este entendimiento de lo que sucedió con los hechos, lo que puede permitir hacer correcciones acertadas.

  “Para muestra un botón”. El pensante ha fracasado en todos los intentos por hacer cambios en su personalidad. O en algunos les va bien, pero en otros aspectos ha tenido que resignarse a ser como es.

  Para conocerse a sí mismo, primero hay que entender, a que “sí mismo” nos referimos. ¿De qué o de quién estamos hablando?

  No es suficiente con repetir como loro que se es un espíritu, o que se es un cerebro pensante. (Teoría de que el cerebro es la consciencia o el productor de consciencia).

  El ser pensantes por naturaleza evolutiva, ha causado que la ciencia quiera fabricar mediante la manipulación del genoma las nuevas generaciones que habitarán el planeta. Ya los humanos no serán un producto aleatorio y los padres podrán planificar la estructura y la personalidad de sus hijos.

  Y los espiritualistas indecisos, sin pruebas ni evidencias de ser ese ente espiritual que trasciende a la muerte corporal, carecen de un conocimiento de suficiente fuerza para confiar plenamente en ellos mismos como espíritus que dicen ser.

  El vivir en un mar de dudas, de pedazos de conocimientos o incompletos, deteriora la confianza en sí mismo.

  Es imposible para un pensante sostenerse firme en sus propios pies. Puede ser una persona tozuda, de esas que no oye razones y por donde mete la cabeza de ahí tienen que sacarlo muerto. Pues, destrozado y muerto lo van a sacar.

  El hecho de que las creencias sean verdades para el que las piensa, no necesariamente son verdades en el mundo que comparten con todos los pensantes.

  Aquí en actividad pensativa; (por Google y Facebook) existe mucho material que puede ayudar a encontrar un nuevo punto de vista, más adecuado para obtener los resultados deseados en una confianza más efectiva.

  Ha sido un placer. Buen provecho con una confianza bien cimentada. Nos vemos pensante.

  Autor: Emilio R. Fernández Ramos