PASOS PARA CONOCERTE A TI MISMO


COMO HACER PARA SALIR DE TU PROPIA TRAMPA. LA IDEA QUE TIENES DE TI, ES EL CEPO DONDE ESTAS ATRAPADO.
    Hola amiga(o) pensante. Aunque te parezca que ya es tarde para hacer algo y no estar en desventaja ante esta crisis que viene como una avalancha amenazando a todo el mundo. Mas tarde se va a hacer si no te detienes y empiezas de una vez a buscar los recursos que te pueden ayudar a paliar, a resistir o a lograr salir victorioso de la pandemia y los sucesivos sunamis económicos que está provocando.
   ¿Qué donde encuentras esos recursos? … Me pareció oír que hacías esa pregunta. Te voy a decir donde buscar…Empuña la mano y deja el pulgar estirado y pega la punta del pulgar en el pecho.
   Esa es la respuesta. “Tu eres la respuesta”. Aunque no lo creas y te entren las mismas dudas que siempre has tenido de ti, juégate el resto que te queda de confianza en ti mismo y arriésgate.
  Es hora de que dejes de pensar tanto en los problemas y te concentres en las soluciones. Detén ese impulso descontrolado de pensar en todo lo malo que está pasando, que lo que consigues es ponerte más nervioso, y concéntrate en buscar soluciones o formas preventivas para salir con el menor daño posible de esta engañosa crisis que no se sabe cuando va a terminar. 
  Ya debes estar cansado, decepcionado y asustado de estar poniendo esa confianza en el gobierno, en los médicos, en la OMS, en el remedio o vacuna para prevenir la enfermedad, etc, y dudando por no saber si tu dios te tiene anotado para que seas un número más de las estadísticas de muertos, o un damnificado de los que no vuelven a recuperar la calidad de vida que tenían antes de la pandemia.
  Opino que se puede estar dispuesto a aceptar la voluntad del dios en el que se cree. Pero demostrado esta, que ese destino no se espera pasando el día acostado en una hamaca, o no levantarse todo el día de la cama esperando con pánico que suceda lo que tiene que suceder con uno, según sea el designio del creador.
   Observa amiga(o), ese es un designio que no se sabe. Por lo tanto, no solo con el sudor de la frente debemos ganarnos la vida, también hay que exprimir el sudor de la mente para que ese tiempo de vida que tu dios te permite, no sea tan tormentoso y sufrido.  
   No podrás saber lo que tu dios quiere para ti en el futuro, si no te pones en acción en este mismo momento con esas ideas que obtengas producto de reflexiones, para encontrar caminos viables para sobrevivir.
  Si cuentas con tu dios, pero tu no cuentas contigo, es para sentirse decepcionado de tener un hijo que uno quiere y confía en su talento, en sus capacidades, y lo ve que se ahoga en una gota de agua y no usa las virtudes que ha heredado de su padre.
   Observa que uso la expresión “tu dios”, ese es mi respeto a tu libertad de pensar. Cada quien debe producir su idea de dios, con las enseñanzas y experiencias que reciba.  
  Por ejemplo: estoy de acuerdo con la respuesta que daba Albert Einstein cuando le preguntaban si creía en dios. El respondía que creía en el dios de Spinoza. (Lee el dios del filósofo Baruch Spinoza y entenderás a Albert.)
   Entonces; ¿cuentas contigo, si o no? …No hay tiempo para lamentos. Recuerda que la idea que tienes de ti, de tu talento, de tus capacidades, es resultado de hechos pasados en los que hiciste una evaluación y llegaste a una conclusión que fue dándole forma a la idea general que tienes de ti.
   En esos hechos pasados, durante y después de los acontecimientos, generaste una opinión y has hecho una serie de conclusiones que le han dado forma a tu personalidad o manera de ser.
  Has hecho un compendio de todas esas consideraciones resultados de las evaluaciones que te has hecho, y lo que tienes en este momento es una síntesis que te explica todos los “porque”, eres como eres.
  Esta es tu gran verdad, esta es tu creencia, esta es la realidad que vives y que seguirás produciendo. Solo si decides observar a consciencia esa creencia que tienes de ti, puedes evitar que esa realidad se siga repitiendo y empeorando, ya que seguirás confiando cada vez menos en ti, en tus capacidades o talento.
   Has lo que te indiqué en la publicación anterior. Siéntate a escribir esa idea que tienes de ti. Tomate tu tiempo para examinar y ver todos los aspectos que abarca en tu personalidad esa creencia.
   Cuando tengas la idea en toda su magnitud, que sientas como abarca y afecta toda tu personalidad, apréndetela de memoria. Convierte esa idea en un mantra, en la letra de una canción, en un poema, o en un texto que puedes decir sin siquiera pensar.
   De esta manera no va haber forma de estar inconsciente de la idea con que se apoyan todas o casi todas tus acciones o actitudes.
  Ya no va a ser una idea que funcione en el automático mental. La vas a estar viendo todo el tiempo y estoy seguro, estoy convencido que vas a empezar a cuestionarte el hecho de que te pongas esas limitaciones.
  Tú, como todos los pensantes, somos ambiciosos con lo que podemos dar de nosotros. El hecho que guardemos silencio, que se crea que es imposible ser mejor, o cualquier consideración limitante, no apaga por completo la naturaleza de un espíritu, que siente que no es verdad eso que cree de sí mismo.
   De ahí nace la insatisfacción, de ahí nace la infelicidad de un pensante. Al ver que, pudiendo, no puede.
   Después que te aprendas de memoria la letra de la canción que escribiste a lo largo de tu vida. Ahora puedes rememorar hechos pasados donde hiciste el ridículo, donde fallaste, donde perdiste, donde tu amiga te ganó el novio, donde la maestra y tus compañeros de clase se burlaron de ti. Puedes recordar y examinar lo que te decía tu padre; “que no ibas a servir para nada”. Etc.
  Examina esas circunstancias y encuentra la conclusión a la que llegaste, y la decisión definitiva, pero sobre todo, la opinión que ibas formando de ti.
  Te puedes dar cuenta que al principio, resistías, te negabas, te defendías, te enojabas y hasta es posible que todavía estés pegado tratando de demostrarle a esa gente que ya no existen en tu vida, que tu si podías, que no eras como ellos pensaban, etc.
   Esta creencia que se tiene de uno mismo, es una mina de traumas, de actitudes y comportamientos que mantienen al pensante atorado en conductas o maneras de ser que le cuestan un mundo poder cambiar.
   Hace muchos años que hice este proceso de examinar la creencia o idea que fundamentaba gran parte de mi personalidad, aquí te he simplificado lo que llevo años clarificar. Se pueden entender muchos; “porque soy así”. Se puede ver como el talento se desperdicia con la desorientación que tiene uno con uno mismo con respecto a sus metas o sueños de vida.
  En la medida que vas examinando hechos, no dejes de ver como han afectado tu personalidad. Este es el primer nivel para empezar a conocerse uno mismo.
   Es decir, se comienza a conocer la personalidad, el traje que hemos creado con pensamientos para desenvolvernos como espíritu o pensantes que somos. Una vez logrado reconocer las ideas fundamentales que uno ha producido para ser como es, entonces se esta listo para ir por nuestra esencia. Para hacer consciencia de nuestra verdadera naturaleza.
   “Mi mismo”, cuando alguien dice “conócete a ti mismo”; ten cuidado a que “mi mismo” vas a conocer. La personalidad es el resultado de lo que piensa el verdadero “mi mismo”.  Pero es prioritario conocer la personalidad mediante conocer las ideas o creencias fundamentales conque la estamos sosteniendo. De esta personalidad forma parte el cuerpo físico, ya que creerse que se es un cuerpo, es una de las tantas ideas que fundamentan la personalidad.
   Para los pensantes interesados, este escrito es una condensación que amerita leerse varias veces y reflexionar cada ves que se haga. Te invito a que lo exprimas y le saques toda la sustancia que puedas, Te va a ser útil en lo que ocurre en este momento y lo que está por venir.
   Ha sido un placer. Buen provecho con “mi mismo”. Nos vemos pensante.
    Autor: Emilio R. Fernandez Ramos

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