MI PADRE; UN SINVER…GUENZÓN. COMO LO EXTRAÑO

  


MI PADRE; UN SINVER…GUENZÓN. COMO LO EXTRAÑO

PROSAS CARIÑOSAS

Mi padre le propuso a mi madre hacer el amor. De eso estoy seguro. No sé qué tan enamorados estaban, pero ella aceptó.

De esta iniciativa de mi padre, nací yo. De un papá…sinver..guenzón… Como me alegra que mi mamá aceptara su lujuriosa propuesta. Fui producto de un deseo placentero donde se entrecruzaron sus genes y vine a este mundo a merodear por las obras de otros hijos que nacieron primero que yo, de padres también sinver..guenzones como el mío. Ya mi padre no está en este plano terrenal, pero tengo una memoria atestada de gratos recuerdos de mi convivencia con él. Son tantos recuerdos que puedo pasar muchos días rememorando historias y relatos con mi entrañable padre. De él pude disfrutar, desde su cordura hasta sus locuras; sus aciertos y desaciertos, sus momentos de felicidades, tristezas y enojos. Para hacer memorias de un padre, que luego se conviertan en material para revivir recuerdos agradables, hay que hacerlo en su cercanía: oyendo su voz, tocando su cuerpo, y sosteniendo su mirada sin parpadear para recibir las bendiciones de amor silenciosas de su alma. El que quiere hacer memorias con su padre, puede encontrar tiempo, en la montaña de tiempo que desperdicia en cosas que no tendrán transcendencia para su vida. Te recuerdo con alegría; mi padre… sinver…guenzón.

Autor: Emilio R. Fernández Ramos   

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