EL PLACER DE ESTAR CÓMODO
EL BIENESTAR ES PROMOVIDO POR LA COMODIDAD.
Hola amiga(o) pensante. La búsqueda de la comodidad es un propósito
alineado con la supervivencia, por lo tanto es un impulso permanente.
Tan importante es encontrar la comodidad en todo momento, que el
continuo fracaso en estar cómodo, obliga a la persona a adaptarse en la menor
incomodidad que pueda soportar.
Es decir, se obliga a adaptarse y a soportar lo que el entorno y la
gente que en él se encuentra le hagan. De esta manera acumula infelicidad. No
está satisfecho pero le da la impresión de que puede sobrevivir con la esperanza
que ocurra un cambio que él no está promoviendo.
Ocurren otras versiones de personas que se pierden nuevas experiencias
desconocidas que pueden ser espectaculares, debido a que primero piensan en la
comodidad. Si visualizan algo incómodo, se niegan a vivir esa nueva experiencia
o a alcanzar un objetivo que quede en esa dirección.
Para resolver esta problemática a la que muy pocas personas le prestan
atención, y que es una causa mayor para que la felicidad y el placer los tengan
que mendingar, haciendo y soportando siempre “lo mismo”. Hay que entender lo
que a continuación les voy a explicar.
Tenemos en primer lugar el cuerpo físico o vida fisiológica, este exige
comodidad de manera intensiva. No hay manera de no darse cuenta cuando está incómodo.
Por eso sentado en la silla sin darte cuenta adoptas posturas donde se sienta
cómodo, o lo menos incomodo posible.
Un cuerpo incomodo no puede dejar de exigir comodidad, y mientras el
cuerpo sufre de incomodidad, el pensante no puede enfocarse o prestar atención
de manera libre a lo que está haciendo.
Pero aparte de la comodidad del cuerpo está la comodidad psicológica.
¡Qué vaina! El cuerpo está cómodo, pero psicológicamente la persona está
incómoda. O viceversa.
La comodidad del cuerpo se puede resolver muy rápido, si se te cansa una
nalga, pones la otra. Si se te cansan las piernas, te sientas; si te duele el estómago,
llamas al doctor.
Pero si tienes un ataque de ansiedad, molestia, disgusto, preocupación
por algo o alguien, deprimido, nerviosidad, etc. ¿qué puedes hacer con esa
incomodidad?
No puedes dormir bien por la incomodidad psicológica aunque tu cuerpo
esté acostado en un mullido colchón de espumas. Y las soluciones que usas a
veces funcionan y otras no. ¿Qué sabes hacer?
La incomodidad psicológica se podría solucionar de manera fácil como se
hace con el cuerpo; “cambiando de lugar o de posición”. Es decir, cambiar de
actitud, o cambiar el tipo de pensamientos, tranquilizar la acción compulsiva
de pensar y suponer pendejadas. En conclusión; control de la actividad
pensativa.
La necesidad de usar fármacos es por lograr la comodidad psicológica,
para poder disfrutar el momento que estás viviendo.
Sin comodidad no hay placer. El tiempo que se pase sufriendo de
incomodidad, sea físico o psicológico; causa que se pierda poco a poco el
bienestar y la salud.
Revisa de vez en cuando qué tan cómodo estás o te sientes. Busca la
comodidad de manera consciente, con el propósito claro de la importancia que
tiene para tu bienestar.
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