AQUÍ; ESTE AÑO NO HAY NAVIDADES


 AQUÍ; ESTE AÑO NO HAY NAVIDADES

(Poema)

¡Ánimo! ¡ánimo! ¡ánimo! ¿Qué pasó con ese entusiasmo? Ya estamos en navidades y por tradición familiar se despierta la alegría y las ganas de pintar, para poner todo bonito y empezar a festejar. Por doquier veo caras de tristeza se quieren poner a llorar, algo les está pasando; me lo pueden explicar.

En este pueblo bendito de riquezas naturales, se escaparon los demonios y no hay nadie que los detenga para evitar tantos males. Tienen al pueblo azotado con algunos colaboradores, cómplices de la mala intención, de la injusticia y los crímenes que se viven en la nación. Por un lado, el demonio de la economía que favorece solo a los privilegiados que pueden darse sus gustos entre los niños hambreados, sin importarles los muertos, enfermos y marginados. La diáspora es otro demonio que está desgarrando el alma, no hay familia destrozada por la dispersión familiar y no hay dinero que alcance para poderse juntar y revivir los recuerdos de una bella navidad. Pero el demonio del terror que acosa a los sobrevivientes que luchan por resistir, es la delincuencia diabólica que no nos deja vivir. Se adueñaron de territorios donde imponen sus condiciones y hay que pagarles peaje y recogerse temprano, y si pones una fiesta tienes que hacerla encerrado. De donde se saca el ánimo y el entusiasmo, para festejar navidades, si lo que abunda es dolor y amargas necesidades, y para colmo de males no hay salud, se mueren los familiares. Y por los vientos que soplan los demonios vinieron para quedarse y si algún día se van, se habrán muerto las navidades.  

Autor: Emilio R. Fernández Ramos    

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